La mente del trader tiene que saber de análisis técnico y debe tener un sistema para operar que se derive de este conocimiento. El sistema debe arrojar pérdidas controladas y ganancias en promedio, superiores a las pérdidas. Para esto, y como parte de su sistema, el trader debe saber gestionar las operaciones una vez las tiene abiertas, sabiendo aprovechar la información que las nuevas velas le van proveyendo.
Para nuestra mente, una operación satisfactoria no debe ser solo la que da beneficios, sino toda aquella que cumple con los requisitos para ser tomada y se gestiona de acuerdo al sistema y no a las emociones.
La mente es nuestra principal herramienta para operar. Por naturaleza ésta tiende a divagar y a desconcentrarse. Lo anterior es más o menos grave dependiendo del carácter nato de la persona y de las circunstancias de vida que esta deba asumir. No obstante, todos debemos adaptar nuestra mente para operar, ajustándola a las características del oficio. Para los casos de personalidades de base muy ansiosas, debería considerarse el tratar esta dificultad antes de incursionar en el trading.
Veamos cuales son las características y exigencias del oficio para las cuales debemos adaptar nuestras mentes:
- La aleatoriedad del resultado de cada operación vista individualmente: nadie a ciencia cierta sabe si al colocar X o Y operación está saldrá ganadora o no. Lo que depende de nosotros es elegir buenos planteamientos y hacer gestiones adecuadas a cada operación cuando la tenemos abierta. Debemos concentrarnos en lo que depende de nosotros.
- El entendimiento de los resultados al corto y al largo plazo: si tienes un buen sistema, basado en conceptos técnicos y con una buena gestión de riesgo, tendrás resultados positivos a largo plazo. Estos resultados no obstante se construyen diariamente asumiendo también pérdidas. Estas pérdidas al principio duelen más mientras se va construyendo la confianza en el sistema. Es decir, mientras se va ganando experiencia.
- El mantenimiento del enfoque del sistema a operarse: el trading es un oficio que exige el comportamiento adecuado para cada momento. Ser pacientes es lo que más nos pide el trading cuando de buscar las entradas se trata. Acá es donde se puede perder el enfoque, tomando operaciones de baja calidad o por fuera del sistema. Tener unas reglas claras para operar, con horarios y registros de las operaciones, suele ser muy útil para mantener un orden y una disciplina frente a la pantalla.
- La neutralidad emocional independiente de los factores personales: sin duda, es una gran cualidad personal el saber gestionar nuestras emociones de forma asertiva. A las personas nos suceden cosas, hacemos cosas o pensamos cosas que nos alteran emocionalmente. Que tan profundo nos alteran, que tanto tiempo nos dura la alteración y que tan capaces somos de pasar la página, nos muestra la madurez que podremos tener para sentarnos frente a la pantalla y operar adecuadamente.
Adaptar la mente al trading implica un proceso que no es fácil de llevar solos. La mente es reacia a muchas de las virtudes que nos llevan a tener una operativa rentable, por eso está la necesidad de adaptarla.
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