Tu trading no puede estar centrado en la búsqueda de resultados. Nuestro trabajo diario es por decirlo así, un baile con el mercado. No bailamos solos. Quiere decir que los resultados diarios que tenemos van en concordancia no solo con nuestra capacidad operativa, sino también con lo que el mercado nos proporciona para operar. Cuando fijamos en nuestra mente la necesidad de alcanzar unos objetivos de rentabilidad, nos volvemos propensos a: i) forzar operaciones: entrar cuando aún no era tiempo o no se daban las condiciones, ii) alargar un objetivo más allá de lo que nuestro sistema marca, iii) dejar correr una operación hacía un stop cuando es claro que puede cerrarse, iv) eliminar un stop y aumentar una pérdida innecesariamente.
Tu operativa debe estar totalmente desapegada del interés en el resultado. Para esto debes concentrarte solo en tomar buenas decisiones de trading, aceptando el baile que consigas en cada día de trabajo. No insistas en medir mucho el desempeño de tu cuenta porque terminas volcando tu operativa en el enfoque al resultado. Obsérvalo sí, pero con tranquilidad y desde una perspectiva de largo plazo. Si te está yendo bien en un momento dado, serénate y no te enfoques en ello. Continua tu operativa como si recién hubieras abierto tu cuenta. Para lograr esto, tienes que aprender a enfocar tu atención, manejando tus pensamientos. Esta es la tarea que todo ser humano y trader debe aprender hacer para ser exitoso en la vida. Aprende sobre meditación, Mindfulness… En nuestra actividad de trading, repito, esto es esencial.
Si aprendes a operar con el enfoque correcto, podrás ahí sí, disfrutar de tu operativa y obtener los beneficios económicos deseados.